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jueves, 2 de febrero de 2012

Gestión de conocimiento e innovación

Un hecho palpable en la subsistencia de cualquier organización es su capacidad para innovar continuamente sus productos, sus servicios y sus procesos, añadiendo a ello un valor agregado que sea difícil de imitar por su competencia. La innovación requiere que se haga una adecuada gestión de conocimineto.

Como ya se manifestó en un post anterior, el capital intelectual de una organización se ha convertido en su activo más preciado, independientemente de las tecnologías informáticas que posea o del tipo de negocio en que se enfoque. El objetivo de potencializar ese activo no es otro que mejorar la eficiencia y el perfil de competitividad de la organización.

El entorno económico global se ha caracterizado por una creciente competencia, por rápidos desarrollos tecnológicos y por productos con ciclos de vida más cortos. Frente a este panorama, la innovación se hace imprescindible.

Davenport y Bibby (1999) señalan que las PYME necesitan desarrollar sus capacidades de innovación más allá de la simple innovación técnica, debido al efecto generado por las grandes empresas al incursionar en los tradicionales nichos de mercado de las PYME. (1)

La siguiente figura muestra la relación entre la combinación de la gestión de conocimiento y las tecnologías de información, con la innovación:

(figura 1)

A partir de esta imagen se pueden inferir dos hechos:

  1. La innovación es el resultado de la combinación entre la gestión de conocimiento y las tecnologías de información.
  2. El equilibrio entre la gestión del conocimiento y las tecnologías de información se encuentra en el grado de innovación.

Con estos hechos se puede concluir que la adecuada gestión de conocimiento en conjunción con un adecuado uso de las tecnologías de información, permiten alcanzar un éxito en la innovación como actividad orientada al crecimiento y la competitividad.






Referencia (1) Tomada de
DAVENPORT, S.; BIBBY, D. (1999). Rethinking a national innovation system: the small country as SME.

Technology Analysis & Strategic Management,vol. Nº 32, pp. 241-255



Información adicional para su organización, por favor contacte a ingjfrb.ai@gmail.com

miércoles, 4 de enero de 2012

Ejemplo de un modelo de gestión de conocimiento

Comenzando 2012 se retoma la línea iniciada en este blog sobre la denominada "gestión de conocimiento", como objeto de aplicación de las nuevas tecnologías de información.

En un post anterior de este blog, se hacía referencia a la diferencia entre adquirir información y adquirir conocimiento, así como la diferencia entre la gestión de ésta y aquella.

La "gestión de conocimiento" es simplemente la administración de los activos intangibles que generan valor para una organización. Por lo general, los activos de este tipo refieren a los procesos que de una u otra forma se relacionan con la captación, estructuración y transmisión del conocimiento. Así las cosas, la gestión de conocimiento se convierte en un concepto dinámico o de flujo(1).

Podría entenderse que el conocimiento es la información que facilita una serie de datos ordenada de acuerdo con un propósito. Sin embargo, la noción que se encuentra en esta definición, válida en el ámbito de las comunicaciones, muchas veces no es coincidente con la realidad de mercado y con el avance tecnológico. De ahí la necesidad de diferenciar los términos dato, información y conocimiento.

En un mundo de continuos cambios, lo que puede hacerse es una aproximación a la noción implícita en esos términos. Un ejemplo es el siguiente: los datos están localizados en el mundo y el conocimiento está localizado en agentes (personas, organizaciones), mientras que la información es un canal entre ambos conceptos. En realidad lo que fluye entre los agentes no es conocimiento, sino datos; el conocimiento es inherente a los agentes dadas sus experiencias anteriores y sus diferencias en la forma que procesan los datos (modelos mentales, modelos organizacionales).

Un esquema ordenado para entender la relación de estos conceptos es el siguiente: 
  • Los datos, una vez asociados a un objeto y estructurados, se convierten en información.
  • La información asociada a un contexto y a una experiencia se convierte en conocimiento.
  • El conocimiento asociado a una organización y a una serie de capacidades organizativas se convierte en Capital Intelectual.

Para desarrollar un modelo de gestión de conocimiento hay que partir del estudio de tres factores, los cuales se representan en la siguiente gráfica.



(figura 1)


Una vez que se tengan los resultados del estudio se procede con la construcción del modelo de gestión de conocimiento, con el fin de que sea una herramienta útil que genere ventajas competitivas. En la siguiente gráfica se aprecia un ejemplo de modelo de gestión aplicable en organizaciones de tipo industrial.


(figura 2)


Es importante destacar que un componente de la gestión de conocimiento lo constituye, para este ejemplo, el análisis de la información, procedimiento que puede ser tenido en cuenta como otro proceso independiente y al que se le puede asociar la noción de gestión de información.

Es precisamente en la gestión de información donde se puede apreciar mucho mejor el uso y la aplicación de las tecnologías de información, del diseño de contenidos y en síntesis, de la arquitectura de información. Puede decirse entonces que estos elementos, que permiten hacer más eficiente la gestión de información, le otorgan a una organización o a un individuo, las herramientas necesarias para desarrollar una adecuada gestión de conocimiento que le permita incrementar su capital intelectual y por lo mismo, generarle ventajas competitivas.


(1) Tomado de:
CARRIÓN MAROTO, Juan. Introducción conceptual a la gestión del conocimiento. (en línea), disponible en:
http://www.gestiondelconocimiento.com/introduccion.htm


(figura 1) Tomada de:
HERNÁNDEZ GORDILLO, Saúl. Gestión del conocimiento; un modelo conceptual aplicado a la industria. (en línea), disponible en:
http://www.gestiopolis.com/canales5/ger/unmoconcep.htm


(figura 2) Tomada de:
HERNÁNDEZ GORDILLO, Saúl. Gestión del conocimiento; un modelo conceptual aplicado a la industria. (en línea), disponible en:
http://www.gestiopolis.com/canales5/ger/unmoconcep.htm





Información adicional para su organización, por favor contacte a ingjfrb.ai@gmail.com

sábado, 17 de diciembre de 2011

Calidad de la información

A propósito del tema de la "gestión de información", existen dos elementos clave que determinan si dicha gestión es buena o mala; se tratan de la información como tal y de la calidad de esa información.

Ya se había expuesto en este blog, como las actuales organizaciones están interesadas en saber manejar y optimizar ese activo nuevo llamado el capital intelectual o, en otras palabras, hacer la gestión de conocimiento. El fundamento que se esgrime por parte de algunas de estas organizaciones, es la adecuada aplicación de las nuevas tecnologías de información y de las nuevas técnicas informáticas.

Es claro que no todo se soluciona con la adquisición del último artilugio informático (iPad, PC, Smartphone, etc) o con la adquisición de la última versión de software; pero hay consenso respecto a que hay que saber utilizar lo que se tiene y que es válido adquirir la tecnología que se necesita para el crecimiento y el sostenimiento del negocio.

Es a partir de esto, como se expuso anteriormente, que se generan las ventajas competitivas entre las diversas organizaciones. Su diferenciación está en la gestión que hagan sobre el capital intelectual, cuya base es el manejo adecuado de la información.

Es claro que la información genera conocimiento y que esa información "administra" datos concretos, datos de calidad para los objetivos del negocio. Sin embargo, hay que fijarse en el empleo adecuado de estos términos pues muchas veces, dentro de una conversación normal, se hace uso indistinto de la expresión datos, información y conocimiento.

Los datos son unidades básicas de información que por sí solos son irrelevantes o por lo menos no pueden producir un conocimiento amplio; por ejemplo, un nombre o un número telefónico son datos que por sí solos no producen un conocimiento sino están asociados a un contexto.


La información es un conjunto de datos procesados dentro de un contexto que agrupados tienen un significado válido para generar conocimiento. Puede decirse que la información es un mecanismo que organiza los datos para producir conocimiento.


El conocimiento es una función o característica propia de un agente que combina información, experiencia y valores agregados.

La clave está en capturar una buena cantidad de datos puntuales para el negocio que, mediante un adecuado procesamiento y una clasificación estructurada, puedan generar conocimiento significativo. Así las cosas, la calidad de la información se encuentra en la forma en que se desarrolla su gestión, su dinámica, su estructura y la experiencia aportada por el agente que hace la gestión.

Es claro que el resultado de una información de calidad es un conocimiento de calidad, oportuno y significativo para el crecimiento y el sostenimiento a largo plazo de un negocio, independientemente del área en que se desarrolle.

 



Información adicional para su organización, por favor contacte a ingjfrb.ai@gmail.com